A veces los propietarios de casas rurales tenemos lo que bien se puede llamar el sindrome de la casa vacía.
Esto ocurre especialmente los domingos por la tarde después de haberse marchado los viajeros.
El puente del 1 de noviembre ha sido tan raro que casi no ha sido ni puente sin embargo hemos tenido una buena ocupación.Lo mejor de todo ha sido el buen tiempo que hemos disfrutado.Nuestros clientes venían de varios puntos de la geografía nacional y han podido visitar el Valle de ordesa, el Cañón de añisclo y las gargantas de la Sierra de Guara.
Con absoluta seguridad quienes mejor se lo han pasado han sido Leyre y Eneko, que no han dejado de jugar con los gatos, ir a dar de comer a las gallinas, y cascar nueces, como vemos en la foto.
Han aprendido muchas cosas sobre las abejas y nos han regalado unos estupendos dibujos.
Ellos han disfrutado y nosotros ahora casi los echamos en falta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Le agradecemos su comentario.
www.casalanau.com