Las últimas lluvias y los calores han resucitado el paisaje.Los montes y los campos de labor son otros.Nuestro jardín tambien. Estaba un poco abandonado y la hierba lo invadía todo, pero con un buen rato de trabajo lo hemos puesto de nuevo en orden.Ahora lucen los lirios.
En este tiempo pasamos muchas horas en este lugar de la casa. Este año, incluso hemos plantado unas lechugas, acelgas, cebollas y apios , justo al lado, para tenerlas cerca.
Teníamos un dilema y era aumentar la zona de jardín o poner un poco de huerto, y al final han ganado las cosas del comer.Las gallinas, al otro lado de la verja, miran cómo crecen las plantas, y están como esperando escapar para escarbar y picotearlas todas.Esperemos que no.
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